Este proyecto, destinado a jóvenes de 14 a 18 años, es un espacio experiencial desarrollado en tres ejes fundamentales: Introspección, percepción del grupo e interrelación con la naturaleza.
En-camina-te
Ponerse en camino es poner en acción a nuestro Ser.
En la actividad nos conocemos, surgen nuestros límites, tanto físicos, como mentales y emocionales. Tenemos la oportunidad de reconocer nuestros patrones, nuestras creencias limitantes, nuestras debilidades y de nuestras fortalezas.
El grupo nos confronta con nosotros mismos, nos hace de espejo y nos muestra nuestra propia imagen. Encontramos fuera lo que llevamos dentro y podemos aprender a observar y comprender cómo modificar ciertas situaciones. El grupo nos empuja a ser la mejor versión de nosotros mismos: es el ambiente que nos acoge y nos sostiene para realizar aquellos cambios y mejoras que queramos.
La naturaleza nos lleva lejos de nuestra cotidianidad, lejos de nuestros hábitos, creencias, adicciones y falsas necesidades, y nos conduce a nuestro ser más esencial. La naturaleza nos ayuda a encontrar nuestro verdadero lugar y procedencia.
El objetivo del proyecto es ofrecer a los jóvenes a una experiencia que les permita resituarse en relación con ellos mismos, a la vez que trascender sus propios límites y empoderarse a ser su mejor versión.
